El mito
del órgano sexual masculino desde la antigüedad
Después de un recorrido sobre
Pariacaca, topamos con su hermana Chaupiñamca quien era hija de un hombre
llamado Tamtañamca y mujer de Huatyacuri. Tenía cinco hermanas, la mayor era
ella, le seguía Llacsohuato, Mirahauto, Urpayhuachac y la última no saben cómo
se llama. Para adorarla hacían carreras
idénticas a las de Pariacaca, persiguiendo a sus llamas u otros animales.
Cuando aparecieron los huiracochas, ésta se escondió convirtiéndose en una
piedra de cinco brazos. El pueblo de San Pedro establecido cerca del santuario
de Chaupiñamca lo llamaban Mama(madre).
Se dice que esa mujer andaba bajo
la forma de ser humano y solía pecar con todos los huacas porque no encontraba
ningún varón a su gusto. Había uno llamado Rucanacoto, cuyo santuario se
encontraba en el cerro de domina Mama. Y aquí viene el dato curioso… los
hombres que tenían un pene pequeño le pedían a Rucanacoto que se los agrandara.
Él, por tener un pene grande, consiguió una vez satisfaces plenamente a
Chaupiñanmca. Por esto, juzgando que sólo él era un varón auténtico y que sólo
él, de entre todos los huacas, se quedaría para siempre, se transformó en
piedra y estableció su santuario en Mama.
Digo curioso porque se nota que
desde antes el tamaño del pene era importante para los hombres, es decir, hay
un cierto interés por esa dichosa dimensión que entre más extensión tenga más
placer causa a la mujer. Según Antoni Bolinches, psicólogo clínico, sexólogo y
miembro de la junta directiva de la Federación Española de Sociedades de
Sexología, cuenta que “La autoafirmación masculina se ha basado siempre en la
potencia y en el tamaño. Muchos hombres no tienen el pene pequeño, sino la
vivencia desproporcionada de que así es. Forma parte de la cultura falocrática
que vivimos”. Un estudio de la Asociación Española de Andrología establecía la
longitud media del pene en erección que
son 13.58 centímetros con un diámetro de 3.82cm. Bolinches dice que el 80% de
la población masculina se encuentra entre los 10 y 16 centímetros, como
promedio.
Por otra parte, los biólogos de la Universidad Nacional de Australia en la revista Proceedings
de la Academia Nacional de Ciencias (PNAS) afirman que las mujeres se sienten
atraídas por hombres cuyo órgano sexual es grande. Y en cuanto a la fertilidad,
el tamaño no afecta porque no es determinante para la procreación simplemente
es tener una buena calidad espermática.
Ahora sabemos que la hermana de Pariacaca tiene
una cierta empatía con las mujeres actuales y que los huacas tenían ese
“pequeño” detalle y siguen teniendo, hoy día, los hombres. Un cliché extraño y
a veces incomodo para algunos, “El
tamaño del pene sigue siendo el mito por excelencia” según Francisca Molero,
codirectora del Instituto de Sexología de Barcelona. Es interesante que el placer se crea a base
del tamaño, siendo que aún con argumento para desmentir esto siga la creencia.
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