De los aspectos
explicados por el Inca Garcilaso de la Vega, en uno de sus apartados se refiere
a como se realizaban las declaraciones de los indios ante el juez.
Similar era la fórmula que usaban en sus testimonios a la usada en el sistema jurídico
anglosajón; mientras que en este se utiliza “Do you solemnly swear or affirm that you
will tell the truth, the whole truth, and nothing but the truth, so help you
God?” –que en español se traduce como “¿Jura o afirma solemnemente que
va a decir la verdad, toda la verdad y nada más que la verdad, y que Dios le
ayude?” –, los incas exclamaban “¿Prometes decir la verdad al Inca?”. Esta era
la forma en que los autóctonos afirmaban que las palabras en sus declaraciones
eran verdaderas, pero claro que es importante precisar que ellos no juraban,
sino que se comprometían a decir la verdad.
Pero ¿quién es el Inca al que prometen contar la verdad? El mismo Garcilaso menciona que se refieran al dios que los indios adoraban y que le llamaban Inca. Puede tratarse del Inca Manco Cápac, a quien se le atribuye el inicio del imperio, o bien que se refiera al Sol que era la divinidad adorada por aquel pueblo.
Pero ¿quién es el Inca al que prometen contar la verdad? El mismo Garcilaso menciona que se refieran al dios que los indios adoraban y que le llamaban Inca. Puede tratarse del Inca Manco Cápac, a quien se le atribuye el inicio del imperio, o bien que se refiera al Sol que era la divinidad adorada por aquel pueblo.
Lo anterior se atribuye
a la época anterior a la conquista española. Una vez establecido el dominio
español y con este sus fórmulas que involucraban a la doctrina cristiana, las
promesas de los indios cambiaron pues no les era posible jurar como los
cristianos ni por sus antiguos ídolos, pues existían solo para adorarlos.
Citando un asunto de Cuzco, menciona que en ese entonces el testimonio de los indígenas
se limitaba a una promesa pero ahora ante el Rey de España representado por el
corregidor de la región, adaptando su fórmula al nuevo sistema.
Por último, solo resta confiar
en que esto no sea una de las idealizaciones realizadas por Garcilaso de la
Vega.