sábado, 17 de agosto de 2013

La competencia como Motor de la naturaleza

El Popol Vuh, o Libro de consejo, fue creado por la comunidad de los indios Quiché, al que posteriormente se concibió como la Biblia de este pueblo, el cual fue traducido por Fray Francisco Ximénez. En él se relatan tres cuestiones principales: el mito de la creación del ser humano, las aventuras de Hunampú e Ixbalanqué y el surgimiento de la sociedad maya.

En lo que respecta a la segunda parte de dicho libro, una de las temáticas que funciona como eje del mito sobre los hermanos Hunampú e Ixbalanqué es la competencia, a partir de la cual se crean los elementos naturales que construyen el mundo. Esta estructura no es exclusiva de los mitos Quiché, sino que existe un paralelismo entre otras culturas respecto a sus mitos de la creación. Tal es el caso de la incáica, perteneciente a la región de Perú, con la historia de Pachamama, concebida como creadora del mundo, diosa de la fertilidad y protectora de la naturaleza[1]. Ambos mitos contienen las siguientes características: 

(a) Enfrentamiento inicial para el cumplimiento de un deseo. En el primer mito es la competencia de Hun Hunampú y Vucub Hunampú con los señores de Xibalbá con la intención de vencerlos en los juegos; en el segundo, el encuentro de los hermanos Guacón y Pachacamac para casarse con Pachamama. 
(b) Fin de la competencia. Se genera una consecuencia al termino del juego o lucha, a partir de la cual se produce un nuevo combate; encuentro al que se le puede llamar generacional, pues en el caso de los Quiché, Hunampú e Ixbalanqué, hijos de los hermanos Hunampú, compiten de nuevo con los de Xibalbá; mientras que en el mito de los incas, luego de la muerte de sus padres, los hijos de Pachamama y Pachacamac se enfrentan con Guacón, el dios del fuego. 
(c) Se obtiene la victoria a partir de la cual se genera un nuevo elemento de la naturaleza.[2] Es notable cómo la victoria no sólo está asociada a la creación sino también la muerte, pues a partir del vencimiento del antagonista cuyo final es la muerte, nacen otros elementos contextuales o explicaciones naturales. Así, a través de la competencia se construye una explicación de la estructura natural. 




[1] Una figura equivalente a ésta es Mawu, perteneciente a la mitología africana, quien además de ser diosa del matrimonio, la fertilidad y creadora del mundo, se le identifica con la luna.  
[2] Sin embargo, esto no sólo ocurre al final, sino que durante el desarrollo de la competencia, tiene lugar la creación de otros elementos naturales (la jícara en el Popol Vuh; una montaña y una isla en el mito de la región peruana). 




3 comentarios:

  1. Es muy interesante como en este proceso de competencia la prueba-y-error son parte fundamental para alcanzar la culminación. Por otra parte, parece que estas historias se adelantan a la teoría de la "selección natural" de Darwin, ¿no crees?

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    1. Sí, en el sentido de la generación de las características naturales a partir de circunstancias contextuales. No lo había pensado de esa forma. Es tan maravilloso como interesante, sobre todo porque estas historias vislumbran la relación entre el ser y la naturaleza como un mismo ente,donde cada parte forma un todo y viceversa. Así mismo, se concibe la muerte como parte de la vida. Además, a diferencia de nuestra cosmovisión, no se le teme al error, sino que se aprovecha.

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