La
obra rescata muchos de los puntos tratados por Lope de Vega en El arte nuevo de hacer comedias, por
ejemplo, la estructura de tres actos, y el elemento tragicómico. Como Lope toca
en su texto, Espinosa se vale de diferentes formas métricas para su obra, aquí
por ejemplo, la obra inicia con un tono belicoso en el diálogo de Sísara. Al
hablar de dicho tema es propio el endecasílabo que se utiliza, pues la guerra
es un tema mayor propio de los héroes y de los caídos, recordando la estructura
métrica de La Araucana, y el discurso
que esta abarca. Otra forma métrica que utiliza Espinosa es la silva en los diálogos
entre los personajes, por ejemplo, la escena segunda del primer acto, donde
platican el capitán y Sísara, es una pequeña silva dentro de la obra. En ciertas
escenas de la comedia el autor escribió también en octosílabos, un ejemplo, son
los monólogos de Jael.
El
argumento de la obra es la relación que se presenta entre Sísara, Jael y Cineo.
Sísara está enamorado de Jael, sin embargo ella lo rechaza, y por medio de un
retrato que llega a las manos del soldado, Cineo comienza a pensar que es engañado
por su esposa, sin embargo, Jael permite que esto ocurra como parte de su estrategia,
al tiempo que se tiene bajo tormento al pueblo de Israel, que finalmente es
victorioso. La obra es ante todo, una comedia de enredos, existen los
personajes que engañan y los engañados, que son los mencionados anteriormente, el
objeto por el cual se inicia el enredo, en este caso, el retrato, y un
personaje elemental para el desarrollo de la confusión: el gracioso, Vigote,
quien sigue las órdenes de su amo, Sísara, y comete error tras error
desarrollando así su papel dentro de la comedia.
Muy buena entrada... qué bien que ya estás contrarrestando tus silencios...
ResponderEliminarMe hacía falta reivindicarme jeje
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